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martes, 2 de agosto de 2016



Después de unos cuantos meses de constantes filtraciones, por fin fue presentado el buque insignia del segundo semestre de la compañía surcoreana Samsung, el ya famoso Galaxy Note 7, empecemos a conocerlo.

Dejando de lado el 6.

 

En una estrategia para unificar su gama alta de terminales con una sola numerología, la compañía surcoreana ha decidido dejar de lado el número “6” para equiparar en nomenclatura a sus terminales franquicia del año, es por esto que el Note obtiene el 7, heredado de la magnífica familia S7; aunque, se podría decir que toma otras cosas prestadas, empezando por el diseño.
 

Si hemos visto un Galaxy S7 Edge, podemos hacernos una clara idea de lo que nos prepara Samsung con el Note 7. Utilizando un cuerpo de aluminio con una carrocería en cristal se podría decir que desde corea no quisieron arriesgarse demasiado con la apariencia del nuevo terminal de la firma, y es que teniendo como base un superventas como el Galaxy S6, el equipo de diseño sólo se encargó de optimizar algunas cosas con el fin de hacer más resistente todo el conjunto, empleando Aluminio de grado 7000, que es mucho más resistente a arañazos, torsión e impactos; así como cristal de la firma Corning Gorilla Glass, en su versión 5, lo que lo convierte en el primer equipo en incorporar este material de la compañía americana. Sobre el papel el Note 7 sería más resistente a arañazos y a quiebres producto de grandes caídas, la firma americana Corning nos garantiza una resistencia a impactos de 1,6 metros sobre superficies de variado relieve y dureza; todo esto con un grosor de 0,6 mm, lo que nos demuestra que resistencia no es sinónimo de tamaño. Para elevar el concepto de resistencia de este Note 7, se emplea una certificación IP 68, lo que lo vuelve resistente al polvo y al agua; al igual que sus hermanos S7 y S7 edge, eso sí, mantenemos cierta reserva por el orificio empleado para alojar el ya famoso S pen, del cual hablaremos más adelante.
 

La cinta métrica nos marca 15,35 cm de alto; 7,39 cm de ancho; y, 7,9 mm de grosor, mientras que la balanza nos arroja un peso de 169g. Sólo para comparar es más compacto que un Iphone 6s Plus, el cual marca 15,82 cm de alto 7,79 cm de ancho; y 7, 3 mm de grosor, si bien el Note 7 es un poco más “gordo”, lo compensa con una excepcional batería de 3500 mAh, 750 más que el famoso terminal de la compañía de la manzana mordida. Éstas cifras son aderezadas con un toque adicional, una espectacular pantalla Edge (curvada en los laterales) de 5,7”, con resolución QuadHD (518 ppi) de tipo Super Amoled. Hablar de la pantalla sería perder el tiempo, puesto que ya sabemos que nos encontramos con la “Mejor Pantalla de un Smartphone” a la fecha, con una representación fiel de los colores, negros profundos, excelente nivel de brillo; así como buen manejo de los ángulos de visión, si nos pidieran una calificación de la misma sería un redondo 10. Como dato adicional es válido afirmar que el panel ocupa un espectacular 78% del frontal, lo que nos fascina y demuestra el porque este equipo es más compacto que algunos contendientes (llámense Iphones Plus) que manejan diagonales de 5,5”.

Para maniobrar nos encontramos con Android, con su versión 6.0 Marshmallow, corriendo bajo la interfaz de Samsung la amada y odiada TouchWiz. La capa es muy similar a la que encontramos en el S7 Edge (por no decir la misma), sólo que añaden los extras ganados por emplear un Stylus en su conjunto. Con el Note 7 nos vamos a encontrar el “Always on Display”,  la multiventana, las notificaciones multicolores de los Edge, así como otras “Apps” exclusivas de la firma, como las Galaxy Apps y Samsung Concierge. 

Cámaras, menos megapíxeles en Pro del equilibrio.

 

Con el Note 7, Samung emplea la misma estrategia utilizada en el S7, bajar los megapíxeles para aumentar la apertura focal del conjunto, mejorando de esta forma la captura de imágenes en condiciones adversas, principalmente de baja luminosidad. Para el módulo trasero, emplea un sensor CMOS de 12 MPX, fabricado por la firma Japonesa Sony, el IMX 260, el cual posee un angular de 26 mm y un tamaño de 1/2.6", lo que nos otorga un tamaño de pixel de  1.4 µm. Otras características de la cámara son su sistema de estabilización óptica de imagen (OIS por sus siglas en inglés); y, estabilización por detección de fase. La cámara trasera es capaz de grabar a 2K (2160p) a 30 fps; a 1080p (Full HD) a 60 fps; y, a 720p (HD) a 240 fps (Slow motion). Para las selfies se emplea un sensor de 5 MPX, con f 1,7 y angular de 22mm (ideal para selfies con más contenido). En esta ocasión vale la pena comentar una de las novedades de la cámara delantera, la cual servirá como medio de desbloqueo del terminal a través de la detección de Iris Ocular, el cual se potencia con un potente sistema de infrarrojos para uso en lugares con baja luminosidad. Si bien es una novedad en la firma surcoreana, ya otros fabricantes, como ZTE, han jugado con esta tecnología, con resultados variados, por lo cual falta probar a mayor profundidad la alternativa de Samsung.
 
Sistema de Desbloqueo por Iris.

Sin Qualcomm a la vista, hola Exynos.

 

No sabemos si habrá una versión con el chipset de la casa americana Qualcomm, puesto que el Note 7 fue presentado con el Exynos 8890 en su interior. Este procesador es un Octacore, que basa su diseño en la interfaz Big Little, con dos conjuntos de proceso conformados por 4 núcleos A53 que alcanzan frecuencias de 1,6 GHz; y 4 núcleos de fabricación propia denominados Mongoose a 2,3 Ghz. El 8890 es fabricado con el proceso de 14 nm FinFET y emplea en el apartado gráfico una GPU Mali T880 MP12 (12 núcleos) a 650 MHz. Para complementar el conjunto, el Note 7 integra una memoria RAM de 4 GB DDR4 (Doble canal a 1,794 MHz); y 64 GB de almacenamiento interno UFS 2.0, con posibilidad de expansión vía MicroSD. Dejando de lado test sintéticos tipo Antutu, podemos decir que se repite la fórmula ganadora del S7, con un hardware potente, pero equilibrado, donde se pone hincapié en el conjunto y no en los fríos números.
 

Algunos extras del equipo son su sensor de huellas dactilares, ubicado en el botón home frontal del terminal; USB Type C (V1.0) con interfaz USB V3.1. (El primer Samsung con este conector); carga inalámbrica Qi/PMA; sistema de carga rápida; y, sensor de ritmo cardiaco.
 

Sin lugar a dudas estamos ante uno de los mejores terminales de 2016, que a la exquisitez del diseño le añade un potente Stylus el cual es capaz de usarse incluso si la pantalla está mojada. Si buscamos un terminal con un toque empresarial, este es nuestro equipo; potente, elegante y con el añadido del S Pen que potencia el apartado ofimático. Si bien se espera un precio para el mercado colombiano cercano a los 3 millones de pesos, se espera un beneficio para nosotros, y es un posible bajón de precio del genial Note 5, que no tiene mucho que envidiar a su evolución, salvo la resistencia al agua. Muchas gracias y hasta la próxima.

Agradecimientos a Samsung Colombia por suministrarnos el material gráfico.