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jueves, 5 de mayo de 2016



Tal como lo adelanto en mi título en esta oportunidad hablaremos de la coreana LG (esta vez te salvaste Samsung), y no, no hacemos este post para agredir a LG, sino para intentar aconsejar (y divertirnos un poco al paso) al gigante de la tecnología. Una pregunta ronda en estos momentos mi cabeza, ¿Quién rayos es el diseñador de LG? ¿Será que hay un Samsung lover colado en la nómina?, no lo sabemos, pero LG debe hacer un giro de tuerca inmediato para poder convertirse en el bello cisne que tanto patrocinan en los cuentos de hadas. A nivel de hardware e innovación poco hay que reclamarle a LG, sólo hay que mirar sus terminales y corroborar algo, el departamento de ID de la firma se esta ganando cada centavo del sueldo, pionero en Pantallas QuadHD, el primero en apostar por la modularidad en un smartphone, uno de los gestores de la guerra de cámaras de la actualidad, ¿Qué tiene que hacer LG para tener el súper ventas que tanto desean?, la respuesta es sencilla, volver a los orígenes de la serie G y mirar como se ha ido afeando su terminal.



El LG G5 es un portento en hardware y software, puro músculo por donde se le mire, innovador y audaz; pero, con el perdón de LG, !Qué feo¡ (al menos si lo comparamos con el S7 Edge, P9, HTC10 y compañía). LG por querer entrar en la moda del metal olvido lo hermosos que resultaron sus anteriores modelos, el G2 una exquisitez, con ese frontal casi todo ocupado por la pantalla enamoró a más de un fan de Android (incluyéndome), el G4 y su trasera de cuero, simplemente espectacular; y hasta el GFlex 2 demostró lo bello que resultaban los smartphones coreanos, pero llegó el G5 a arruinarlo todo. Pero ¿en qué me baso para catalogar al G5 como poco agraciado?, empecemos:



- Su doble cámara trasera. Sin lugar a dudas uno de los lunares del diseño del equipo, y no debemos culpar al doble sensor, si miramos al P9 se demuestra que se puede hacer un terminal con doble cámara que no resulte feo a la vista.



- Metal Plastificado. Una de las señas de identidad de los terminales metálicos es esa sensación fría que dan al tacto, LG que hace, "forrar" todo el terminal con una capa de (redoble de tambores) plástico. Vamos LG, ¿es en serio? Tanto esperar para esta experiencia, mal LG, muy mal.



- Batería extraíble, esto es una bondad...que puede convertirse en la peor de tus pesadillas....todos sus más cercanos competidores lo superan en capacidad, dando por lo menos la jornada completa de vida, con el G5 esto va a ser una tarea titánica, prefiero un diseño unibody y un mastodonte de batería.



-Terminaciones, los anteriores puntos son subjetivos, lo que a mi me parece horrible, a otro le puede resultar hermoso, pero esto no tiene perdón, Deadpool ven con tu catana milagrosa y libra al G5 de su miseria. No se perdona que el poderoso G5 tenga problemas con su "tapa" inferior. En algunas pruebas se demuestra que el equipo no cierra parejo, dejando pasar incluso luz entre la unión de las partes, no concibo que un terminal tan costoso (casi 800USD) tenga estos problemas fatales.



Como el G5 viene a ser el terminal estrella de la temporada de LG, se entiende que el resto de la familia de smartphones de la casa coreana se inspiren en su diseño (tal como paso con el G2, G3 y G4), ojalá me equivoque, o por lo menos corrijan los horrores que cometieron con el pobre G5, creo que hay que iniciar una campaña que diga, Adopta un G5, el mundo te lo agradecerá, desde ahora aviso que sería el primero en darle acogida en mi hogar, pues si bien es feo, Nadie le quita lo bailado. Adiós y hasta la próxima... 

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